Es un ícono más de la ciudad de Bariloche, visita obligada del turista que cámara en mano trata de reflejar el instante exacto en el que esascuatro figuras aparecen ante la mirada indiferente del residente. La cita eslas 12 y a las 18. Con la puntualidad con la que este añoso mecanismo tañe puntualmente sus campanas. Cada media hora, en los horarios señaladoscuatro figuras talladas en madera asoman rotando para saludar al visitantey contarles nuestra historia: en primer término aparece el indígena, originalhabitante de estas tierras, de raza mapuche y tehuelche. Luego el jesuita,cuya primera misión funda el padre Nicolás Mascardi. A continuación el soldado, simbolizando la Campaña al Desierto, incorporando esta zona anuestro territorio. Finalmente aparece la figura del labrador, representando a los primeros pobladores, provenientes en su gran mayoría de países de Europa central, quienes desempeñaban actividades relacionadascon la madera, la agricultura y la ganadería.